En la Parte Vieja de Donostia la hostelería y el comercio turístico se lo están tragando todo, perjudicando gravemente a las y los vecinos. Además, desprecian por completo el euskera en los negocios para extranjeros. Varios agentes sociales hemos protestado por medio de una acción irónica. #WelcomeToPintxoland
Hemos colocado pancartas #WelcomeToPintxoland en varios accesos a la Parte Vieja y hemos repartido 5.000 folletos que denunciaban el ataque a vecinos y vascoparlantes, simulando ser folletos publicitarios de un bar de pintxos.
La OMT (UNWTO) y el Basque Culinary Center, con el apoyo y financiación de instituciones públicas locales, celebran estos días en el Kursaal el Foro Mundial de Turismo Gastronómico. Las y los donostiarras, sin embargo, no se tragarán el menú de la turistificación salvaje.
La turistificación está transformando Donostia. Entre otras cosas, los establecimientos comerciales y de hostelería están cada vez más orientados a las y los visitantes. En concreto, hay un tipo de hostelería que ha ido creciendo y sustituyendo, en los últimos años, a establecimientos hosteleros tradicionales, así como a comercios de proximidad vinculados a las necesidades del vecindario. En los barrios con mayor presencia turística, especialmente en la Parte Vieja de Donostia, estos comercios y establecimientos hosteleros dirigidos al turista son, en gran medida, los principales causantes de los daños a la forma de vida de las y los vecinos: el ruido, la basura, la ocupación del espacio urbano, etc. Además, operan en base a un modelo profundamente basado en la acumulación de propiedades y en las malas condiciones laborales, y son el baluarte de la economía sumergida.
A raíz de este modelo de hostelería orientado al turismo, el panorama lingüístico de la ciudad también está cambiando: el castellano, el francés y el inglés son los idiomas principales en cartas, carteles y publicidad en bares y restaurantes, mientras que el euskera tiene cada vez menos presencia. Los euskaldunes no son los clientes prioritarios de estos bares y restaurantes, por lo que el euskera casi ha desaparecido del mapa en la Parte Vieja de Donostia. Es un barrio con muchos vecinos y vecinas que tratan de vivir en euskera y que atrae a muchos euskaldunes; pero no tienen opción de leer la carta ni pedir en euskera. En esta ansia por hacer negocio con los forasteros, se está extendiendo la falta de respeto hacia los locales. No olvidamos la llamada de la patronal hostelera a las y los donostiarras a volver a los bares, cuando los visitantes extranjeros desaparecieron durante la pandemia. Entonces sí, sintieron la necesidad de apelar a los locales, cuando cambiaron las condiciones para hacer negocio.
Si eso fuera poco, la «singularidad» local se convierte en un activo para el negocio turístico; por ello, utilizan el euskera no como lengua de comunicación, sino como decoración del parque temático Pintxoland. En la turística Donostia hay bares con nombres de la cultura y tradición vasca en cada esquina, pero allí sólo encontraremos «tortilla de patatas» y «pintxo de morcilla». El paisaje urbano de la Parte Vieja se ha banalizado de tal forma que, es prácticamente igual al que nos encontramos en cualquier ciudad turistificada del planeta. En definitiva, la industria turística convierte al euskera y la cultura vasca en un mero elemento de branding; El euskera se utiliza para darle un sabor especial a la experiencia turística; entienden nuestra ciudad como un producto a la venta y el euskera es sólo un lazo colorido pegado a ese producto para los turistas.
No queremos dejar de lado a los encargados y trabajadores de bares y restaurantes que, desde lo local y la proximidad, en euskera y desde el respeto a las y los euskaldunes, resisten al modelo bárbaro de hostelería. Los sentimos a nuestro lado en la lucha por frenar la turistificación y a favor de un modelo de ciudad y de barrio diferente. Este modelo destructivo de turismo ataca el bienestar y los derechos lingüísticos de las y los donostiarras. Vemos imprescindible que Donostia gire hacia el decrecimiento turístico, para que vivir bien y vivir euskera en la Parte Vieja esté al alcance de todo el mundo.
Porque queremos seguir viviendo en nuestro barrio y en euskera, ¡stop turistificación!
- Plataforma Bizilagunekin
- Asociación de vecinos Parte Zaharrea Bizi
- Parte Zaharreko Euskara Batzordea
- Alde Zaharreko Gazte Asanblada
- Alde Zaharreko Ernai